La belleza no es un crimen

Lo nuevo de Decléor, que se posiciona en cosmética natural de alta tecnología, reivindica la búsqueda de la belleza de una forma natural, sin tapujos, y sin tener que sentirse culpable por ello, un mensaje que parece dar una vuelta de tuerca a aquel de Dove, que marcó un antes y un después en la comunicación del sector.

 

Creada por la agencia Shackleton y con el claim "Beauty is not a crime" (La belleza no es un delito), la campaña consta de un spot de TV en el que, a través de testimonios de mujeres que reconocen que les preocupa su aspecto físico y no se avergüenzan de ello, se presenta el sérum Aromessence, que promete devolver la juventud y la belleza a la piel.

El spot dirige a los espectadores a la web www.beautyisnotacrime.com, donde, además de conocer la filosofía de esta marca perteneciente a Shisheido desde el año 2000, y sus productos, pueden acceder a la sección Beauty Faces, un concurso en el que se busca a mujeres que defienden la actitud "Beauty is not a Crime." Para participar, las internautas tienen que subir una foto a la web y presentar la candidatura a través de la red social Facebook para conseguir votos. Las más votadas ganarán un pack de productos Decléor valorado en 200 euros.

La campaña se complementa con promociones en puntos de venta, campaña de banners y envíos de marketing directo, creados por la misma agencia.