"El hombre encuentra a Dios detrás de cada puerta que la ciencia logra abrir." EINSTEIN


sábado, 24 de julio de 2010

TEORIA DE LA EVOLUCION.

Cuanto contemplamos el tema del crecimiento o desarrollo de las diferentes especies o seres vivos del planeta, nos encontramos con el inevitable dilema de la creación o evolución. Siempre se creyó en un Ser Supremo como un arquitecto creador, Dios. Esta es una creencia en el ámbito religioso, pero con el avance de la ciencia y la filosofía, comenzaron a surgir otras teorías que se contraponían a la visión tradicional creacionista.
Científicos como Lamarck y Darwin, principales mentores del evolucionismo, desarrollaron la teoría de la evolución, negando la tradicional creencia de la intervención de un arquitecto creador. Lo que hasta ese momento se creía una creación divina, los cientista adoptaron la teoría de la evolución, anteponiendo así, la teoría evolucionista a la creacionista.
El rápido avance de la ciencia en las últimas décadas, está revirtiendo este ahora tradicional concepto de la teoría de la evolución de Darwin, principal preceptor de la evolución. La teoría de la selección natural de las especies, cambios originados por las condiciones del medio ambiente. Aquellas mutaciones genéticas al azar, provocadas por las condiciones climáticas, que le permiten una mayor adaptación y sobrevivencia. Esta siendo desfasada, entre los científicos contemporáneos y especialistas en el tema.
Darwin dio un clásico ejemplo. Los primates, especies de monos antecesores de los humanos, en su necesidad de sobrevivencia debían alimentarse. Para ello, tenían que recoger frutos de árboles muy elevados como palmeras y otros, por ejemplo. Esto los obligó a pensar como podía hacer para obtenerlos, así les permitió desarrollar su cerebro y capacidad mental.


Al trepar a los árboles para conseguir los frutos, este esfuerzo a través del tiempo, le permitió desarrollar sus músculos y transformase en lo que hoy es el género humano. Lo interesante, es que todas las especies de monos trepar a los árboles, pero ¿Cómo unos se transformaron en seres humanos y otros siguen siendo monos? Además, la raza de los gorilas, son especies mucho más fuertes que los hombres, en este caso, habríamos involucionados en vez de evolucionar.
Lamarck, es el otro gran exponente del concepto evolucionista. Su teoría consistía en que, el hombre produce cambios en su vida para adaptarse al medio ambiente donde habita. Estos cambios son heredados de sus ancestros. Ellos se producen de una forma automática por el uso y el desuso de sus órganos. Estos cambios adquiridos son trasmitidos por herencia biológica a sus descendientes. Estas mutaciones son cada vez más complejas y se orientan a la perfección. Estas mutaciones que proponen tanto Darwin como Lamar, tiene un desarrollo desde lo externo lo interno, ya que modificaría el simiente, origen de la próxima especie.
Esta teoría de Lamarck, fue refutada por científicos de su época, principalmente por Georges Cuvier, entre otros. Ellos hicieron un experimento científico, cortándole la cola a un ratón. Después de veinte generaciones, siguieron naciendo ratones con colas, ratones del mismo linaje. Dejando claramente demostrado, que los cambios producidos por el medio ambiente, al cortarle la cola al ratón, no se hereda biológicamente.
Los creyentes creacionistas, se afirman en los relatos del Génesis en la Biblia, donde no habla de evolución, sino está expresado la intervención de un creador (Dios) ellos afirman  que las especies son inmutables. Además hicieron pruebas muy contundentes, trayendo a Europa, cuando estos iniciaron su exploración por África, America y el Pacifico,  trajeron al viejo continente, especies de animales y plantas que no existían en Europa y que a pesar del cambio climático, no presentaron cambios biológicos.
Por otra parte, científicos en actualidad han encontrado en excavaciones innumerables fósiles, que a través del Carbono catorce, son existencia de seres vivos de miles y millones de años atrás. Especies que aun existen en la actualidad, como elefantes y algunas especies de lagartos, por ejemplos, entre otros y no han sufrido ningún cambio fisiológico a pesar del transcurso de tanto tiempo.
Para llegar a una conclusión más científicas, que las lógicas que hasta hemos expuestas, sin que estás no tengan también un contenido científico. Es mejor analizar esta teoría, bajo principios y leyes universales, como la ley de causa y efecto, por ejemplo. Lo que observamos de esta ley es que, todas las características existentes en el efecto visible, existieron primero en una causa invisible. Puede haber causas que no llegan a manifestarse en el mundo del fenómeno, pero absolutamente no existen efectos que no provengan de una causa previa. Con el avance de la ciencia, llagamos a saber que todas las características genéticas de los seres vivos, están registradas en el ADN de cada especie, y que es en esté código genético donde se originan los cambios.
Lo podemos comprobar a través del desarrollo de la genética molecular, que a llevado a revelar que, los cambios residen en el genoma de los organismos de cada especie y que es posible de datar a través del reloj molecular. En la década del ’40, experimentos científicos, realizados por McCleod y McCarty identificaron al ADN, como “principio transformante” responsable de trasmitir la información genética. Es decir, que las mutaciones se producen en código genético del ADN, y no a través de la influencia del medio ambiente.


Otros científicos, como Francis Crick y James Watson, en 1953, hicieron un exhaustivo trabajo de análisis sobre la estructura de ADN, basados en experimentos anteriores. Iniciando así, la era de la biología molecular y transformando así el tradicional teoría de la evolución, por un proceso molecular. La mutación se produce en los segmento del ADN.
En el tiempo de Lamarck y Darwin, no se conocía el ADN, por ende, lejos estaban estos científicos de saber que las verdaderas mutaciones genéticas comienzan en la estructura del ADN, y que es éste, quien se encarga de trasmitir la herencia genética. No es el medio ambiente, el cual produce los cambios. Los materialistas ateos, continúan siendo darwinianos y lamarckianos, porque de aceptar que los cambios se originan en el código genético, no solo rompe su teoría, sino que abre las puertas a un arquitecto diseñador muy difícil de aceptar para ellos.
Las mutaciones no se producen al azar, ni son provocadas por el medio ambiente. Ahora ¿Quién genera entonces los cambios en el ADN? Si estas mutaciones, tienden a ser cada ves más complejas y buscan perfeccionarse, como dijo acertadamente Lamarck. Naturalmente podemos observar que existe una intencionalidad muy clara detrás de estos cambios, una idea que diseña, un logo.
El ADN, esta compuesto por energía como toda existencia. Esta energía es el aspecto externo de Dios, aunque en su origen es una pre-energía, como fue explicado cuando abordamos el tema de la “Energía Universal”. Esta, tiene un aspecto más interno, que es el carácter de Dios, donde se origina el cambio a través de un proceso mental, similar  al de los seres humanos, y luego es aplicado al ADN. Esas mutaciones que presenta en ADN, que para la ciencia son azarosas, comienza en la mente de Dios “causa” y los “efectos” son aquellos cambios “azarosos” que se observan en al código genético del ADN.
Los cambios que se pueden observar en el código del ADN, es una simple visión externa. Ellos existen en un estado previo en forma invisible. El Logos (razón ley) que podemos llamar, la mente o el espíritu del ADN. Al igual que los principios y leyes que gobiernan el comportamiento de las partículas y los átomos. La energía quántica afirmas que estos principios ya existían previamente en los campos quánticos energéticos y son incorporados al mundo de la materia en forma heterónoma, con la aparición de las partículas y átomos en el mundo del espacio. Uno podría romper e investigar el átomo, pero no puede observar ninguno de estos principios, ya que estos son invisibles, pero son el motor del mundo microcósmico.
Finalmente, la ciencia se ha encargado de desmitificar la clásica teoría de la evolución, visión expuesta por Lamarck y Darwin. Ahora, no podemos negar que hay un proceso evolutivo en las especies. Primero, el más simple referido al crecimiento de las especies, desde que nacen hasta que alcanzar la madures, presentando una dirección y una meta clara. Otro es, dentro de la familia de los felinos, por ejemplo, existe una escala que va evolucionando, como los guepardos, es una especie más evolucionada que los gatos, pero menores a los leopardos, y los tigres mucho más poderosos que estos.
Naturalmente esta evolución que observamos, no se puede producir por una acumulación azarosa de partículas y moléculas. La materia por si misma es incapaz de crear vida o producir cambios, como lo explica el científico Sharon. Sino que existe un diseño pre configurado, y los cambios biológicos en las especies comienza en el ADN, pero toda esta energía, es dirigida por una fuente energética universal, una mente cósmica.
Las mutaciones en los seres vivos, simplemente son efectos resultantes de los cambios del ADN, que es la causa. A su vez, estas mutaciones en el código genético son efectos que comienzan en la mente de Dios, que es la causa principal donde se originan todos los cambios. Pero, no es que Dios esté separado, todo está compuesto por energía, aspecto externo de Dios y está pre-energía, tiene un carácter interno o mente, capacidad pensante. Todo está ahí, la creación es como una transformación (*)
(*) Ampliaremos en el próximo tema “Cómo crea Dios”
Que sucede con esos fósiles, de especies intermedias, que han existido, pero se han extinguido, los famosos eslabones perdidos. Para los evolucionistas, las existencias de estos fósiles intermedios, son especies transicionales en el proceso evolutivo. Los creacionistas niegan estos, afirmando la inmutabilidad de las especies y que cada una de ellas es ya terminada de acuerdo aun plan previo. Mientras que para los evolucionistas, todos somos seres en una constante transición evolutiva, al igual que las especies transicionales.
Esto abre otro dilema, que no sabemos si se los cuestionan los evolucionistas o no ¿Somos especies terminadas o transicionales? Y, si somos existencias transicionales ¿Cuál sería nuestro destino final evolutivo? Los seres humanos deben crecer mental espiritualmente y sobre su potencial de amar, esto es lo más importante en la evolución de la humanidad, puede hacerlo sin experimentar necesariamente cambios biológicos.


No podemos negar que existe un proceso evolutivo en los seres vivos, ya que la vida comenzó con una ameba, luego pasó por innumerables millones de especies hasta llegar a los seres humanos. Esto no quiere decir que la teoría de la evolución, a través de las mutaciones provocadas por el medio ambiente sea correcta. Este proceso evolutivo no niega tampoco la intervención de un arquitecto.
Todo está compuesto por energía. Esa energía oscura o constante, de la cual habla la cosmología, cubre el espacio infinito, existió de siempre, es eterna y absoluta, no puede ser creada ni destruida. Es de donde se originó el universo y todos los seres vivos. Existe un progreso evolutivo en el universo que aún esta en expansión y un desarrollo en todos los seres vivos.
Este progreso, evolución o avance, tiene una dirección y propósito claro, de un diseño pre establecido, existe un logos. Hay una idea pensada, que viene de una mente universal diseñadora o creadora como dicen los creacionistas. Esa es la mente de Dios, el gran arquitecto universal. Es la naturaleza de esa energía constante, de donde parte la idea, y la  pre-energía, aspecto externo, es lo que le permite a Dios, darle forma y estructura a todas las especies y al universo entero. Los creyente hablan de un mundo trascendente, este, también es obra del maestro proyectista universal.
Entonces, que sucede con estas especies intermedias llamadas transicionales por los evolucionistas. Dios guía estos procesos evolutivos a través de la Primera Energía Universal, energía constante llamada por la ciencia y que esta en todas las cosas creadas (Todo está compuesto por energía -Einstein-). El proceso evolutivo de una especie a otra, se produce dentro de especies de la misma familia o raza, como los chimpancés, orangután y los gorilas, entre otros en los monos. Los patos, gansos y cisnes en los pájaros y los felinos ya nombrados, para dar algunos ejemplos.
Los cambios propuestos por los evolucionistas, de las transformaciones de una raza a otra, como de reptiles a pájaros, por ejemplo. Se ve menos factible de acuerdo a una lógica científica. Es mucho más lógico que cada una las razas, comiencen desde una línea horizontal compuesta por energía, que sirve como base y luego cada una de ellas se desarrolla o evoluciona en forma vertical con un diseño pre determinado, tanto para las especies intermedias, como aquella con un propósito de permanencia, o sea terminadas.
Las especies intermedias, fueron escalas evolutivas para llegar a una determinada especie terminada, es decir, aquella, las cuales Dios planifico que permanecieran como existencia, las cuales diseño de antemano al igual que las existencias transicionales. Las intermedias sirvieron como transicionales, como dicen los evolucionistas, pero estas mutaciones que producen cambios evolutivos, se original en el código genético del ADN, a su ves estos comienzan en la mente de Dios. Conclusión, existe un proceso evolutivo en la creación, pero este, es guiado por Dios a través de la Primera Energía Universal, energía constante. Esta creación la podemos llamar, una evolución creacionista o una creación evolutiva.




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